domingo, 22 de febrero de 2009

Deux est machina!

He vuelto a ver mi capítulo favorito de Ergo Proxy (El 11: "La blanca oscuridad") , la que considero la mejor serie de anime japones que he visto. El tiempo y el conocimiento de nuevas obras se encarga de poner las cosas en su lugar, porque ahora la noto con cierto aire tomado de Blade Runer.

A ver si con este fragmento los pico un poco para que se animen a verla.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi capitulo favorito fue uno que se llamaba algo asi como: perdiendo el tiempo.

Manuel dijo...

¡El 16!donde están en el camión y Lil escribe en su diario.
Me gusta este en particular, por la coversación entre el Ergo, el bibliotecario y Vincent; en ella se tocan temas muy importantes ¿quién soy? ¿qué es mi realidad?¿cuál es la relación entre el lenguaje y el pensamiento? Desde ese momento, si tenía alguna duda, me di cuenta que no era una serie ordinaria.

Anónimo dijo...

ese capítulo que dices tambien me gustó aunque debo confesar que lo tuve que repasar más de una vez. El concepto de "pienso luego existo" (en el cual se basa toda la serie) siempre me ha fascinado, pero creo que todavia no entiendo bien lo del "latido original".

Manuel dijo...

No sólo eso, creo que la historia se basa en la pregunta ¿QUIÉN SOY? y de allí a la serie de derivaciones de preguntas que puedan surgir. Si lo piensas, es eso lo que hace que Vincent haga todo el viaje hasta Moscú y esto demuestra que él es el personaje principal, no Lil.
Lo del latido del corazón viene de sus propias palabras, ya que no se puede enfrentar un ser a otro cuyo latido es mayor, porque su latido revela su fuerza de vida, es decir: Sería ilógico enfrentar al Proxy y su realidad contra la de Vincent humano, primero debe aceptar a este como su fuerza de vida.
Hay otro capítulo muy bueno donde llegan a una ciudad desierta, Lil aparece como "Ofelia muerta" (cuadro de John Everett Millais) flotando en el río y Vincent cae de realidad en realidad, como dentro de un espejo.