domingo, 29 de abril de 2012

Poemas de Livio Ramírez


Livio Ramírez (Olanchito, 1943) fue dirigente estudiantil en el Instituto Central Vicente Caceres en sus años de adolescencia. Viajó a México en 1967 para estudiar Medicina en Guadalajara; pero luego se matriculó en la UNAM, Distrito Federal, en la carrera de Derecho. Se inscribió en el taller de literatura que impartió Juan Bañuelos en esa casa de estudios, entro en contacto con diversas figuras de la literatura mexicana (Juan Rulfo y Efraín Huerta, por ejemplo) y representó a los estudiantes en los tributos que  que la UNAM hizo a Pablo Neruda y Nicolás Guillen. Participó activamente en el movimiento estudiantil de 1968, que fue reprimido de forma sangrienta en la Plaza de las tres culturas (Tlatelolco) y que luego sería conocido como "La generación de Tlatelolco". Los sucesos de esos años están reflejados en su libro Arde como fiera. En 1971, regresó a Honduras, impartió clases en la Facultad de Derecho de la UNAH y fundó el primer taller de literatura de nuestro país. En 1972, obtuvo mediante concurso un puesto en el servicio exterior como agregado cultural en Madrid, España, y fue testigo de La Transición Española; cuyos eventos se plasman en parte en su libro Escrito sobre el amanecer. A finales de los 70's pasó a servir como Secretario de la representación de Honduras ante la ONU en Ginebra,  Suiza, y en 1981 ganó el Premio Platero de Poesía convocado por la ONU con su libro Descendientes del fuego. Regresó a  Honduras en 1981, fundó el Taller de Literatura Jacobo Cárcamo y, ese mismo año, contrajo matrimonio con con Reyna Alfaro, con quien procreo dos hijos: Francisco José y Livio César. De 1985 a 1994 trabajó en SECTUR y, junto a otros artistas, entre otros proyectos, se elaboró en cuatro tomos una antología de la poesía hondureña y un plan cultural nacional bajo asesoría de la  UNESCO y dirección nacional,  éste último quedó truncado con la entrada del nuevo gobierno en 1994. Ha recibido múltiples reconocimientos: ingresó a la Academia Hondureña de la Lengua en 1998; en 2001 le fue otorgado el Premio Nacional de Letras "José Trinidad Reyes" por la UNAH y el Premio Nacional de Literatura "Ramón Rosa" en el año 2002.  Ha publicado los libros Sangre y estrellas, Arde como fiera, Descendientes del fuego, Escrito sobre el amanecer, Personajes y otros poemas y Obra reunida. Como ya dije en otra entrada, sobre él versó mi trabajo de investigación para graduarme de Letras.  

Bajo la noche funeral
los jóvenes masacrados seguían temblando
todos tenían en los ojos
más o menos el mismo recado
no nos olviden
véngame
te amo

(Del libro Arde como fiera

Todo parece que estuviera muerto
pero no
Yo siento este volcán de gente
y un día de éstos
las avenidas parecerán serpientes
y amaneceremos con armas
brillando entre los dedos
no sabría decirlo
pero me consta
que algo de nosotros 
saldrá implacablemente ardiendo
que a nadie engañe este aire:
sólo es el principio del incendio

(Del libro Arde como fiera

Un hombre dice amor
de mil maneras
y le dan horror a cucharadas
míralo ahora
roto bajo el aire
algo quiere decirte
escucha
fíjate
pudiera ser que el hombre seas tu mismo
y es otro el que va dentro de tu traje

(Del libro Arde como fiera)

Del cuerpo asesinado
salieron al final
fieras
y fieras
flechas de amor puro
la luz con garras
buscaban hombres nuevos y coléricos
pero el mundo fue igual
y murieron rugiendo

(Del libro Arde como fiera)

Empezaré diciendo
dos fantasmas
viven en la ciudad
por separado
exactamente sólo dos fantasmas
hablan de amor
miran pasar la vida
y a veces
hasta cantan
algo implacable los une
dos ríos son
y a la hora señalada
se tiran con sus siglos en la cama
no queda ni una gota de ellos mismos
se mueren tiernamente en la batalla
hacen otro universo en un instante
después les da miedo
pavor
sus propios trajes
ponerse el nombre
todo su fantasma

(Del libro Arde como fiera)

Fragmentos de Escrito sobre el amanecer

Digo que la poesía
Es el único documento personal que poseo.
Carezco de otro medio de identidad.
Digo que eres mi centro enllamarado.
Mi código de fuego.
Mi texto de aullidos.
Explosión queridísima donde escucho la vida,
Arma para vivir.

Digo que eres
Mi atigrada columna que fluye.
Árbol de guerra. Árbol que embiste y aletea.
Sol absoluto, nuestro, que devoras los ojos
para poder seguirte.
Largo ríos de fuegos
donde al verme contemplo y soy la multitud.
Lava donde sí corre mi verdadera imagen.
Lectura y escritura de uno mismo.
Eres el resplandor que emana
de esta hondonada.
Efulgencia invisible de las entrañas.
Domicilio de toda nuestra rabia.

(...)

Huelga en el metro.
Huelga de los ciegos en la Puerta del Sol.
Y sus pancartas me rompen el alma:
"Los ciegos españoles
no somos los españoles ciegos".
Dos millones de obreros paran la Construcción.
Los exiliados vuelven.
He aquí que han regresado
PEDRO ROJAS, DOLORES,
RAFAEL, JUANA VÁSQUEZ:
No cabe en el pecho.
La ciudad hace trizas su mortaja.
Miro las avenidas colear como cometas.
El día es un gran lienzo de Picasso.

(...)

Quiero escribir la vida de golpe.
Quiero que griten mis amigos muertos.
Que salgan de la tierra,
Puros como relámpagos.
“Quiero escribir pero me sale espuma”.
Así es, César Vallejo,
pero me salen los asesinados
Y más espuma
Y más asesinados
y más país de muerte atravesado.
¿Y el lenguaje vivísimo que no puede
escribirse?
¿Y todas las palabras que se niegan a ser
sólo palabras?
¿Y la canción total?
Sueño con páginas
Realmente viscerales,
sueño escribir un libro huracanado,
algo como un zarpazo.
Sueño con un canto de actos
que no me necesite
y salga al mundo,
y viva igual que un gavilán de ojos metálicos.

(...)

Queridos, detestables vecinos
de este edificio
donde aún leo la post-guerra:
Mañana seremos nuevamente
las piezas
que la gran maquinaria exige.
Mañana habrá que llegar puntuales
a los respectivos mataderos.
Que descanses Madrid, reposa
estás rendido.

Buenas noches América.
Atlántico que me unes y me separas.
Buenas noches país descuartizado.
Patria vendida en el mercado negro.
Ciudad que trituraste mis sueños
y mis nervios.
Barrio desdibujado,
patio de Nina Licho,
casa donde nací.
Apartamentos, cuartos;
increíbles cavernas donde he vivido.
Sepulcro de mi padre.
Ferocísimo amor que me consumes.
Estoy solo, impotente
ante los estallidos
de mi propia memoria.
Es como si un animal salvaje 
revoloteara en mi sangre.
Como si un clavicordio
rodara en mis entrañas.

Hasta mañana
seres humanos.
Que descanses
casa degenerada:
Planeta que deberías nacer de nuevo.
Hasta mañana, ciudad.
Buenas noches, amado mundo podrido.

(Del libro Escrito sobre el amanecer)

Dormida. Deshojada.
Desbordante lectura.
Mirándote soy otro.
Me ilumino al tocarte,
creándote me creo.
Mis manos son planetas en donde vive,
pero son tus raíces de fuego
y más allá del cielo creces,
oceánica ascensión.
Espiga inabarcable que sueñas a mi lado.

(Del libro Descendientes del fuego)

Recorro la ciudad

A la velocidad de un fantasma
recorro la ciudad.
Si esto tuviera rostro
lo golpearía
como a un enemigo
a quien se odia
desde el centro del odio.
Qué peste disfrazada:
Escaparates
que nada tiene que ver con la vida.
Lujosos edificios
donde se planifica la barbarie.
Amor,
me duele esta monstruosa maquinaria.
Ven amor mío,
acércate.
Apágame esta noche
que me devora el pecho.

(Del libro Descendientes del fuego)

Ciudad

Esta es la ciudad donde se aman:
Un río derrotado
Puentes que unen la muerte con la muerte
La bestia de mil caras
Cuyo ojo es una llaga que odia el mar
ultrajados y largos 
son sus días
límita aquí el amor con alimañas

(Del libro Descendientes del fuego

Los amantes abren el día
La vida: más golpeada
Pero ellos la levantan
En secreto en silencio
Ha empezado la guerra:
Con su amor han sitiado la ciudad

(Del libro Descendientes del fuego

Las palabras

Hoy no bastan.
Las rompo.
Las arrojo al vacío.
Yo sangro: no me sirven.

(Del libro Descendientes del fuego)  

Pintura de Chagall

Fuimos tú y yo
esa pareja
que por amor venció la gravedad
y flota fascinada en ese lienzo

(Del libro Personajes y otros poemas)

Personaje XII

Me largo
En estos sitios sórdidos
Se fue la juventud
Me largo
Voy a vivir a la intemperie
No tengo más proyecto que mi rabia 

(Del libro Personajes y otros poemas

Personaje XVIII

Diariamente
lo obligan
a ese círculo atroz.
Sin embargo,
él escucha como crece el amor.
Siente como su pulso acusa
y arremete.
Son los últimos días de la estación.
Alguien
aquí
reparte
las armas del insomnio.
El otoño
es un faraón en desgracia.
La poesía se cumple.
Su vida no se cumple.
Él lucha entre palabras.
A estas alturas
puede firmar su acta de muerte
o nacimiento.
Se encuentra en el espejo
y es una muchedumbre furiosa que lo mira.

(Del libro Personajes y otros poemas)

Década

La poesía contigo
La poesía conmigo
La poesía mostrándote
Su brújula salvaje
La poesía abrazándote
La poesía diciendo
Con su espejo de fuego
Mírate
No traiciones la luz
Que te fue dada
No se apaguen tus manos

(Del libro Columna que fluye)

Petición

Pido que las palabras salgan de este libro
que escribí con los ojos
y solamente quede en blanco el origen.
Quiero que sea talada esta selva de números
que oscuramente crece en nuestra cabezas.
Quiero que se extienda un silencio
como todos los océanos juntos,
para que verdaderamente pueda ver la transparencia,
el tiempo tigre,
los días elefantes,
los días unicornios.
Y nunca más, nunca más
cerrar los ojos ante el espíritu de El Señor
moviéndose sobre las aguas.

(Del libro Columna que fluye)

1 comentario:

Mario dijo...

Me gusta mucho disfrutar de la poesia y por eso es un placer cuando encargo comidas a domicilio y me quedo en casa descubriendo las obras de diversos poetas