domingo, 27 de octubre de 2019

El amor visto como una búsqueda de lo perdido

Pues la inmensidad no es sino el caballo de tiro que saca
a la carreta del atolladero; y vamos hacia la razón.
pero el genio es una inmensa pequeñez, unas gotas
del corazón que amparan lo mismo a la liebre que al cazador.

¡Cuán suavemente, amor, como en el sueño de una rosa,
el viento se desliza sobre la tensa pradera de la noche!
Ve cómo los grandes ojos de madera de los bosques
observan la arquitectura de nuestra inocencia.

Tú, la ciudad; yo, el forastero; éste, el camino:
y cada uno la obra de los demás.
Y no es que el hombre tenga que esforzarse más, ni cesar la compasión; sino que
ha de vivir más libremente; que en todas sus ciudades ondee limpia una bandera…
Hemos estado demasiado tiempo solos, amor, y se ha hecho terriblemente tarde
para los pies traspasados en el agua, y no debemos morir en  este instante.
¿Te has preguntado por qué todas las ventanas del cielo estaban rotas?
¿Has visto acaso a los desposeídos en la tumba abierta de la mano de Dios?
¿O es que quieres poner de acuerdo a la alondra con la  música fatua de la guerra?

He allí el paso silencioso en la nieve; el forastero;
el reyezuelo lisiado; la monja; la bailarina; el ala de Jesús
sobre los peregrinos de la villa; y he allí
muchos brazos desesperados a nuestro alrededor y alrededor de todo lo que sabemos.

-Kenneth Patchen (Estados Unidos, 1911-1972)

domingo, 20 de octubre de 2019

Angelus


"-Camarada, ¿pueden tener alas los enanos?" 

Lech Majewski (Katowice, Polonia, 1963) es uno de tantos directores poco conocidos en nuestro país. Su obra tiene un alto contenido onírico y guiones de fuerte carga poética. En Angelus (2001), un grupo de artistas polacos esperan que se cumpla la profecía de su maestro: la aparición de los diversos signos del fin del mundo, pero también la llegada del "Angelus", un ser puro que nos salvará mediante su sacrificio.

Pasan los años y el sujeto no aparece, pero las señales se suceden; en general, signos de la modernidad: las guerras mundiales e invasión de Polonia por parte de los nazis, el arribo del comunismo a Europa del Este y la llegada del totalitarismo stalinista. Entre todo esto, la espiritualidad y las figuras religiosas se anteponen al materialismo de la época como una vía de redención o un regreso a la infancia simbólica de la humanidad: Los ángeles acompañan a los enamorados, a los enanos les crecen alas a pesar de las críticas de los camaradas y un hombre espera, en lo alto, su sacrificio final para salvar a toda la humanidad. Los milagros se transforman en algo cotidiano, pero nadie quiere verlos.  

Angelus es un filme místico, en el sentido de María Zambrano: "un amor que debe ser elevado, limpiado, para lograr salvarnos". Al final queda la incógnita de lo que vendrá. El Angelus, ese ser llega y está allí suspenso en la cima de la montaña; aunque no se muestra el acto de salvación; porque mirarlo no es necesario, se trata de un acto de fe: un ruego al espectador para que posea la certeza de lo que no se ve. 

sábado, 12 de octubre de 2019

True love will find you in the end


Su voz bastaba para rasgar la armadura del mundo. A mis veinte y tantos de aquel entonces,  nunca había oído una promesa de amor incumplido tan conmovedora. Descansa, Daniel Johnston.