domingo, 29 de noviembre de 2009

Materialismo y realidad




Tomado de la BD "Persépolis" de Marjane Satrapi

sábado, 28 de noviembre de 2009

¡Esta boca es mía!

Denle play a la canción de arriba. El día anterior al 28 de Junio, esa mañana, mucho antes de que siquiera imaginara que al día siguiente iba a estar protestando ante una casa presidencial tomada por militares, un día antes de que aviones de la fuerza aérea sobrevolaran mi barrio y me despertaran; en el minuto cultural sabatino pasaron esta canción que se figuró como un guiño. Yo estaba indeciso todavía sobre lo de la cuarta urna, porque aunque creía que era necesario consultarle al pueblo, también estaba el aspecto legal; así que, para olvidarme de todo, decidí ir a ver los grabados de Chagall. Cuando me encontraba a algún conocido hablaba de las cosas con él como si fuera el fin del mundo. Y sí, fue el fin de un mundo y de muchos otros mundos. Esa canción estuvo en mi cabeza todo el día.

¿Qué aprendí en los días posteriores al 28? Aprendí que hay una serie de personas que, tras la propagación de una paranoia orwelliana hacia un comunismo que cayó en 1991 o a un socialismo del siglo XXI, lo que desean es conservar sus privilegios, su estilo de vida ultraconservador (preguntémonos el por qué de la prohibición de la PAE con fecha 29 de Junio) cuya única visión de la democracia es legitimarse en el poder. Sí, así es, no le pongamos adornos al asunto, cito las palabras del representante legal de las F.F.A.A en una entrevista de El Heraldo: "No está dentro de nuestros principios reconocer gobiernos de izquierda" ¿Democracia señores?... Llegar a decir que nos interesa sólo conservar la serie de privilegios que hemos heredado a lo largo de una vida cuando el 70% de la población vive en la miseria absoluta ¿cómo se le llama a eso? Se le llama egoísmo. Haciendo un plagio de Cortázar podría decir que la realidad de Honduras es un tipo sin piernas y lleno de pus que se arrastra en el parque central hacia mí para pedirme las sobras de mi almuerzo, cinco niños hinchados de lombrices que se pasean por las calles de la frontera con Nicaragua o dos sujetos que se agarran a cuchilladas en un vertedero de basura.

Pero aclaremos algo, Zelaya nunca fue la salvación de nada. No, la verdad Zelaya en la izquierda fue siempre un “cero a la izquierda”, pero, quizás por su propia ceguera política, se le dio un GOLPE DE ESTADO y ahora hay medios cerrados, persecución política, terrorismo, paramilitares, insurgentes, 4,000 violaciones a los Derechos Humanos y más de 100 muertos (sí, yo no creo en los listados oficiales por varias razones de mi trabajo). Lo que no puedo creer de todo eso es que exista gente con mentalidades tan retrógradas o tan engañadas o tan temerosas que sean capaces de aceptar que se haya vuelto a las décadas pasadas con doctrina nacional de seguridad y todo el combo incluido, que cuando se diga que la única forma de defender la democracia y la libertad es eliminándolas lo acepten sin más ni más.

Quizás Honduras haya ganado más en esta crisis o quizás la gente vuelva a ser la misma a la que nada le importaba. No lo sé. Pero hay algo que sí quiero decir, yo no me voy a manchar ni mi dedo ni mi dignidad por votar en un acto más ilegal que en otras ocasiones (recuerdo que hace años en el T.S.E a mi mamá le pidieron un viaje a Miami por una diputación, ¿se imaginan entonces como será en esta ocasión?) y no quiero que los que voten por alguien se quejen el día de mañana por los actos ilegales de un gobierno que de seguro continuará con la misma política de los anteriores, tampoco quiero que señalen con sus dedos manchados hacia aquellos de este gobierno que algún día tendrán que responder por varios actos ante cortes nacionales o internacionales. Ustedes ya habrán perdido ese derecho moral, porque fueron ustedes los que les abrieron la puerta para que las cosas siguieran como siempre ¿Entienden?

jueves, 26 de noviembre de 2009

Víctor Jara fue acribillado


Según nota de la BBC, a petición del juez que investiga su muerte, el cuerpo de Jara fue exhumado para realizarsele una autopsia, de ello se determinó que ""Se encontraron más de 30 lesiones óseas producto de fracturas provocadas por heridas de proyectil, más algunas provocadas por objetos contundentes que no corresponden a heridas de bala. También se presentaron fracturas que no son herida de proyectil" esto último confirma que fue torturado. Aunque hay sospechoso todavía no se ha establecido con certeza quien es el culpable.

Para quienes no lo conocen, Víctor Jara fue el músico y director de teatro insigne en Chile hasta la caída del gobierno de Salvador Allende cuando por su filiación al partido socialista y el carácter contestatario de su música fue aprisionado en el estadio nacional de Chile, que en ese momento servía de campó de concentración para presos políticos al gobierno militar. Se espera un masivo funeral, que preparan familiares y la fundación Víctor Jara, para regresar el cuerpo a su tumba: "Víctor va a estar acá. Vamos a abrir las puertas el día jueves al mediodía y de ahí ininterrumpidamente hasta el día domingo. Luego vamos a ir caminando hasta el cementerio, donde va a ser finalmente sepultado", expresó König, quien destacó que va a ser distinto a 1973, cuando "Joan lo sepultó de manera prácticamente clandestina".

Los dejo con una canción parte del tributo (que no deja de emocionarme) que le hicieron con su voz. Sé que, después de tantas cosas, es muy significativa para muchos.


Ningún cañón borrará
el surco de tu arrozal.
El derecho de vivir en paz.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Como veo al Cardenal Rodríguez y su séquito...



Roma, película de Federico Fellini.

P.D: Hace mucho que me valen las opiniones políticas del Opusdei que nos gobierna

lunes, 23 de noviembre de 2009

Estudiar Derecho (2)

Y continúo con mis reflexiones sobre la experiencia en derecho…

• Tercera etapa: Reconciliación y purgatorio

Tardíamente terminé de reconciliarme con la carrera de Derecho. Esta etapa inicia cuando por fin elegimos nuestra orientación, antes en derecho existían diversas orientaciones en las que cada estudiante elegía especializarse: Derecho Internacional, Derecho Administrativo, Derecho Laboral, Derecho penal, Derecho Administrativo y, si mal no recuerdo, también Derecho de Familia. Yo elegí Derecho internacional, en otras orientaciones tenía muchos peros como para optar por ellas y en especial por Derecho penal (¡!) que después de Derecho internacional era en la que menos alumnos había (mmm… ¿Por qué será?) Las secciones en mi orientación eran muy pequeñas, en la que más había eran de 20 alumnos, eso hacía agradables las clases y en parte me ayudó a reconciliarme con mi carrera. Nosotros estudiábamos: Los organismos internacionales, la integración de Centroamérica, el proceso de la unión europea, los tratados internacionales, el derecho diplomático y llevábamos una segunda clase de ciencias políticas.

Me llamaba la atención derecho internacional porque era una pequeña ensalada de todas las cosas; además de estudiar gruesos tratados internacionales debíamos saber de historia para determinar el porqué de determinada situación internacional o los avances y retrocesos del Derecho de integración, en Derecho diplomático, por ejemplo, aprendimos desde cómo redactar una carta a un presidente o rey hasta cómo se debía comportar, comer y hablar en una en una reunión diplomática y de hecho la parte final de la clase era una cena con un embajador; aunque aclaro que no recuerdo mucho de lo que me enseñaron , pero por allí tengo mis apuntes de cómo salir airoso en una mesa con seis tipos de cubiertos y con el pan a la izquierda.

La parte mala del Derecho Internacional es que en nuestro país no existe una academia, con ello me refiero a que la carrera de diplomático no está especializada y de allí es que resulta que muchos sujetos colocados por cuestiones políticas vayan a dejar en vergüenza a nuestro país en diversas ocasiones (obviaré contar del general que le dio un beso a la reina de España o del que se orinó en una palmera de la casa blanca); esta era una de las razones para que no hubieran muchos alumnos. En países como Perú, para no ir tan lejos, aquellos que deseen estar en el cuerpo diplomático deben tener una maestría en Derecho diplomático de la academia de Lima, dos personas con parentesco no pueden estar en la misma misión o cierta cantidad de personas de la misma familia no pueden ser diplomáticos; los puestos son obtenidos en base a un sistema de escalafón y el gobierno sólo puede nombrar al 30% de los embajadores en base a cuestiones políticas; el resto los selecciona la academia. Pero en Honduras para estar en el máximo escalafón sólo se necesita la nota de un prominente polítiquero.

En este momento, cómo para que no nos olvidemos de la miseria humana, llega la hora de hacer la práctica pública, que se realiza en el consultorio jurídico gratuito. No olvidaré jamás el día que nos dieron la charla introductoria a la práctica y nos dijeron quienes eran nuestros coordinadores o encargados de firmar, porque cómo no éramos Abogados nuestros documentos los debía firmar alguien que sí lo fuera y así tuvieran validez legal. La charla era en una iglesia evangélica, la daba un abogado bajito y pedante que nos dijo: -No se extiendan en los escritos, sean concretos que lo único que importa en el derecho es el proceso y nada más, no ocupamos poetas, si se las quieren tirar de escritores váyanse a letras.- Me pareció de los más irónico que pusieran a hablar al tipo ese y que dijera justamente eso (¿de dónde lo sacaron?) Como había llegado tarde, me tocó preguntarle quién era el abogado que sería mi coordinador y sólo me respondió que él ya lo había dicho, que si yo no lo había escuchadol no le importaba porque no era su problema.... resulto ser él, por suerte nunca tuve que verlo personalmente ya que sólo se limitaba a firmar.

Inicié en la jornada de la tarde, debía estar dos horas todos los días en un edificio donde apenas cabíamos. A mí me toco el profesor más estricto como supervisor, muchas veces nos daba regañadas o nos atacaba con su sarcasmo si cometíamos un error; siempre decía que prefería hacerlo él a que lo hiciera un simple archivero de la corte. Debo aclarar que a pesar de su trato áspero, con él aprendí más de lo que hubiera aprendido con alguien a quien sólo le interesara que nosotros cumpliéramos nuestras doscientas horas y es que él que no tuviera tres sentencias firmes no salía de ese consultorio. Para obtener un caso debíamos estar en el corredor del edificio y tratar de “capturar” a cada persona que llegase para que fuéramos nosotros los elegidos por ellos para resolverle sus problemas legales. En realidad los casos eran de personas de áreas marginales y de tipo familiar, agrario o de trámites administrativos; muchos de ellos resultaban chistosos, como el caso del tipo a quien demandé por alimentos y toda su familia llegó a asegurarme que él era un buen muchacho y que la mujer que lo demandaba no era más que una cualquiera que había engatusado a su muchachito, y también fue muy contradictorio el hecho de que toda pareja a la que le debía tramitar un divorcio terminaban reconciliadas o retiraban la demanda, claro que todo mundo feliz por eso, menos yo que no veía como obtendría mis tres sentencias firmes si mi casos seguían siempre ese camino (Ya sé que es egoísta y cruel, pero es la verdad) además de que no faltaba quien me molestaba con que yo tenía un efecto reconciliatorio en los futuros divorciados (XD).

Tuve que estar más allá de las 200 horas en mi práctica, la suerte no me acompañaba y en el Registro Nacional de las Personas cometieron tres veces el mismo error en el inscripción de una persona fallecida en el extranjero, después de lo cual enviaban de regreso el documento y debía hacerse de nuevo el trámite; ello que me valió no graduarme ese año y cuando por fin mi supervisor notó que llevaba demasiado tiempo me absolvió de las tres sentencias ¿Y en cuanto al caso? pues yo entregué mi informe y se supone que se lo debían dar a otro pasante, aunque no sé si continuaron con el caso.

Después vino la práctica privada, 600 horas en que se debía trabajar en una institución. Yo seleccioné el Ministerio de Relaciones Exteriores. Gracias a una recomendación fui a parar a la sección de tratados, me tocaba prestar información sobre tratados suscritos por Honduras a las personas que lo solicitaran, ayudar a redactar dictámenes sobre los tratados a suscribir y responder la correspondencia; trabajos que realicé con poco interés y esfuerzo para ser sincero. En las horas libres prefería subir a la terraza a leer y me sentía desesperado por entrar a letras a tal grado que me quedaba trabajando horas extras todos los días. Aunque las personas de la oficina eran muy agradables, los días se fueron muy lentamente y finalmente terminé dándome cuenta que había laborado 40 horas de más. Presenté mi informe y todo se acabó o eso creía porque hacía falta el taller de la monografía.

Creí que había terminado, pero no; ese año había sustituido la elaboración de una tesis por un curso de investigación jurídica. Al principio me resultó difícil encontrar un grupo para mi trabajo, porque era el único de la orientación internacional; pero elaboré un proyecto de investigación sobre el tratado de libre comercio con otras tres compañeras de la orientación mercantil y todos felices. Llevaba mi clase en el edificio viejo que está a la par de Odontología, mientras cursaba esa clase se me hacía tortuoso que mi aula quedara justo en un punto donde se podía mirar, a lo lejos, la carrera de letras y entre ellos estaba ese extraño barranco al que da el jardín botánico de enfrente del edificio CB. Terminé todo y finalmente presente mi trabajo.

El trámite de graduación fue engorroso a más no poder. Nuestra facultad, en vez de que hiciéramos trabajos manuales, nos pedía una “contribución monetaria” que serviría para reparar algo del edifico. A nosotros nos tocó los baños. Después creo que los siguientes pasos fueron los mismos de todos los estudiantes.

Para concluir debo decir que no puedo quejarme de que esta carrera no me haya servido o no me servirá, (¿cuántos podrán decir en el futuro que tienen dos carreras?) pero en definitiva no es algo que me veo ejerciendo dentro de tres años cuando salga de la carrera de letras. Si alguien revisara mi C.V. constatará que la mayor parte de los cursos se inclinan por Letras y la actividad laboral por Derecho, lo cual dice mucho de mis preferencias a futuro. Ian me preguntó hace un tiempo sobre ¿Qué se sentía estudiar derecho en un país donde las leyes importan muy poco? - bueno- le dije- deberías notar que ahora estoy estudiando letras y creo que eso explica muchas cosas.- Finalmente, los dejo con algo de los Simpsons…

sábado, 21 de noviembre de 2009

Estudiar Derecho (1)

Como ya había prometido, hablaré sobre mis razones para no estudiar Derecho en mi blog y las razones para estudiar letras en el blog de la carrera. Han pasado muchos años desde que me gradué de esta licenciatura y en un principio, cuando tomé conciencia de mi error, asumí que había sido el peor de mi vida lo cual me llevó a una espiral de decepción sobre lo que sería mi vida personal; pero el paso del tiempo todo lo cura y ahora puedo reflexionar menos visceralmente que en ese entonces: Inicié a estudiar derecho debido a un gran interés por las ciencias políticas y terminé derecho porque de algo tenía que vivir. Esta serie de reflexiones las presentaré en dos entregas en este blog, en parte porque son muy largas. Puedo dividir mi experiencia en derecho en tres etapas:

• La primera Etapa:Ilusiones

Esta parte fue la más satisfactoria, comencé llevando clases en donde nos enseñaban el basamento teórico del derecho. Ciencias Políticas, Sociología, Introducción al Derecho, Teoría general del estado, Derecho Constitucional, etc. Leímos a los padres de la política (desde Aristóteles a Marx), estudia el origen del Derecho actual ( el derecho romano y las fuentes del derecho) y al estado (Formación, historia, constituciones). Las clases eran generales, así que ya se imaginarán las clases de problemas por aulas, secciones o sillas que debía hacer. Pero aun con ciertos problemas, fue aquí donde me dije “Esta es la razón por la cual estudié Derecho”, pero desconocía lo que vendría.

• Segunda Etapa: Infierno (digamos que todos los círculos en uno sólo)

Esta segunda etapa, en mi experiencia personal, la puedo catalogar como de desengaño y decepción, desde ella comenzó mi calvario para darme cuenta que el derecho no sería el estudio que me llenaría en la vida. Las clases comenzaron a ser más textuales y uno conoce a los peores maestros, además de darse cuenta de las “suciedades” de la facultad. Técnicamente las clases que uno llevaba en esta parte eran sobre la legislación nacional: Derecho civil penal, laboral, administrativo, mercantil, etc. Las clases tenían alrededor de 200 alumnos por sección, las recibíamos en aulas o auditorios donde apenas cabíamos y debíamos seguir cargando nuestra silla siempre

El primer presagio de lo que esta etapa sería fue mi visita al congreso. Llegamos muy temprano y entramos para mirar cómo se aprobaba una ley, un diputado levantó la mano para exponer un proyecto a favor de que se aplicara la pena de muerte; mientras ese hombre hablaba, los demás diputados lo que menos hacían era escucharlo y cuando llegó el momento la votación, miré a muchos de los que eran mis profesores levantar la mano para votar aun en plena plática y sin siquiera voltear a ver qué era lo que se estaba aprobando o desaprobando.

La mayoría de maestros que tuve en ese tiempo se limitaban a tomar el código, abrirlo y leer desde un artículo a otro, sólo deteniéndose para preguntar -¿Hay dudas? ¿No? Entonces continuemos- tuve la terrible experiencia de llevar clases con el actual presidente del congreso quien nos hizo comprar un libro de introducción al derecho procesal, nos dijo que leyéramos el libro y sólo llegaba a ponernos un examen al siguiente mes. En una clase de derecho civil IV un candidato al Colegio de Abogados nos obligó a comprar un texto que el mismo vendía sobre derecho civil y que no era más que el resumen que yo podría haber hecho, además de eso “solicitó” que fuéramos a votar en las elecciones estudiantiles para la AED (Asociación de estudiantes de derecho) y “recomendó” por quien debíamos votar, a pesar de que sólo había un candidato (así es la democracia en derecho) lo que además de asegurarnos un buen presidente nos daría unos puntos extras. Pasadas las elecciones, Levantó una lista de quienes lo habían hecho y quienes no. Él colocaba un tipo de examen distinto a cada grupo de estudiantes, misteriosamente a los que no fuimos a votar nos costó más pasar el examen que a los que sí fueron. Pero no todo era malo, de vez en cuando uno encontraba un profesor que valía la pena. Recuerdo a cierta abogada de Derecho Civil 3 que, en vez de colocarnos un examen sobre los artículos del código civil, nos presentaba en el examen un caso y las posibles soluciones que en base a la ley le daríamos. Había profesores que eran unos completos léperos, por ejemplo aquel de Derecho Agrario que si a una muchacha le faltaban unos cuantos puntos para pasar les pedía “un besito”, cuando una compañera iba a pedir su nota, siempre llevaba a su hija con ella; porque intuían que si el tipo miraba a la niña, ese degenerado no se atrevería a pedirle nada.

En cuanto a política, la facultad de Derecho es una pequeña representación de nuestros políticos: Había que tener cuidado con mostrar tendencias de izquierda, pues la mayoría de los profesores profesaban una derecha a ultranza, entre sus apelativos para lo que lo hacíamos estaban: Congelados, ñangarozos, cabezas calientes, etc. apelativos que repetían cada vez que podían en clases ( allí la razón de que en vez de la facultad de Derecho, ahora le llamemos la facultad de “Derecha”) Todavía me resulta trágico que en esa facultad lo que menos se respetara fuera la democracia y sobre lo de la elección del Decano tengo el recuerdo imborrable: Cuando este se había lanzado como único candidato, un muchacho se levantó para recriminarle la falta de democracia en la facultad, ese muchacho era Armando y si no me falla la memoria cuando alguien le pregunta por lo qué pasó después, él sólo responde -Pues ahora estudio psicología.-

Esta etapa se termina con las clases de práctica procesal, en donde nos hacían aprendernos de memoria todos los escritos que se supone deberíamos, algún día, presentar en el juzgado. Un profesor calvo y de grueso bigote nos instruía sobre el proceso, que era la única parte interesante ya que memorizar semejantes mamotretos de nos sé cuantas páginas me dejaba exhausto. Lo más chistoso y trágico es que hubiera sido más fácil y agradable de aprender si, en vez de pedirnos los textos al dedillo, nos hubiera enseñado un poco de retórica jurídica; clase que no sé por qué no se incluye en el pensum de Derecho, debido a que es tan fundamental para entender la estructura y la elaboración de un escrito legal.

Me faltaban sólo 10 clases y ya para este momento había caído lo más bajo que se podía, estaba tan decepcionado que no me importó perder la clase de Derecho mercantil 2, había estado en el taller de literatura de la UNAH, mis lecturas ocupaban cada vez más tiempo y llevaba la clase de cine. Todas estas experiencias me sirvieron para tomar la decisión de entrar a letras en cuanto terminara derecho.

Continuará...

martes, 17 de noviembre de 2009

Un poema de la mano de Julio


Una vez me regaló un poema, en 1952, en mayo de 1952. Léalo: "Veo el mundo como un caos y en su centro una rosa, veo la rosa como el ojo feliz de la hermosura y en su centro el gusano, veo el gusano como un trocito de la inmensa vida y en su centro la muerte, veo la muerte como la llama de la nada y en su centro la esperanza, veo la esperanza como un vitral cantando a mediodía y en su centro el hombre."

-Edth Aron
El poema es de Julio Cortázar. Edith Aron es quien en gran parte sirvió de modelo para el personaje de la maga.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Rimbaud en imágenes

Antes de iniciar, saquen de sus mentes la imagen de Dicaprio actuando de Rimbaud por favor

Una buena intención. De este puedo decir que no me gustan esos colores, me recuerda a un vídeo de los Beatles y se ve muy artesanal. La verdad es que se parece a esos automatismos escritos que hacíamos, en ellos una imagen mental daba lugar a otra y al final terminábamos tan exaltados que nos temblaban las manos.

De este me gusta la música, la selección de textos y la forma en la que lee... pero no veo que tengan mucha relación las pinturas y obras con los versos, a menos que fuese una introducción al arte de vanguardia.


Perdón, pero me da risa como se mueve la boca Rimbaud al leer Ofelia :P


¿En un anuncio de Whisky?¿Japonés?

En el Corto Maltese...


"Go, Rimbaud GO" así se llama está canción del grupo Indochine XD

Reenviando: votar por nadie

Quizás una de los artículos que me ha llamado más la atención es el que publicaron en mimalapalabra y que originalmente es de "El blog de carlos. Aquí les dejo el link y vaya que tiene razón:
Mi voto por nadie Tomado de: Blog de Carlos

jueves, 12 de noviembre de 2009

¡Yo también digo NO!

Después de oir esto está de más decirles que no iré a votar:


La traducción al español:

Ahora que estamos juntos
diré lo que tú y yo sabemos
y que a menudo olvidamos:


Hemos visto al miedo
ser ley para todos
Hemos visto la sangre
que sólo hace sangre
ser ley del mundo.

No, yo digo no,
digamos no,
nosotros no somos de ese mundo.

Hemos visto el hambre
ser el pan de los trabajadores

Hemos visto
presos
a hombres llenos de razón.

No, yo digo no,
digamos no,
nosotros no somos de ese mundo.

No,
digamos no,
nosotros no somos de ese mundo.

El original en catalán:

Ara que som junts
diré el que tu i jo sabem
i que sovint oblidem:

Hem vist la por
ser llei per a tots.
Hem vist la sang
-que sols fa sang-
ser llei del món.

No,
jo dic no,
diguem no.
Nosaltres no som d'eixe món.

Hem vist la fam
ser pa
dels treballadors.

Hem vist tancats
a la presó
homes plens de raó.

No,
jo dic no,
diguem no.
Nosaltres no som d'eixe món.

No,
diguem no.
Nosaltres no som d'eixe món.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Honduras, je t'aime

"Ni Clinton, ni Insulza, ni Arias Sánchez han logrado una solución. Yo propondría lo que puede proponer un escritor de ficciones: que reinventen ese país en el centro de África."

-Horacio Castellanos Moya,
(Respuesta ante la pregunta de cuál sería la solución para la crisis hondureña)


Si alguien se da una vuelta por Tegucigalpa, se dará cuenta de que la belleza de la ciudad reside en que parece un corte de los milagros de muchos kilómetros de extensión. En su parque central ustedes podrán ver las más extrañas deformidades: primero está la mujer de obesidad mórbida, sin piernas y cuya pus guinda de lo que fueran sus rodilla; el hombre drogado que no tiene manos y que se arrastra, porque su joroba es tan grande que le impide ponerse en pie; también está la anciana con un bocio grande que le cuelga como una cresta de gallo con salpullido y finalmente el niño con retraso mental o simplemente resistolero que se queda pegado en las vidrieras de Burguer King mirando a la gente comer. De vez en cuando alguna niña de cinco años se le acercará a decirle que tiene hambre y , si tiene suerte, será un hombre arrastrándose sin piernas que jalará su pantalón mientras usted está sentado comiendo en una banca.

Así como cada calle tiene su mendigo, cada barrio posee su destacamento de pobres que buscan diferentes cosas en la basura y que pueden aparecer en grupos de familias o de simples extraños que se encuentran atraídos por el olor de la basura (que la alcaldía siempre tarda muchos días en recoger). Ellos pueden buscar diferentes cosas: están los que buscan objetos reciclables para venderlos en las fundidoras y que son capaces de robarse hasta las placas conmemorativas; y están los que buscan comida, estos simplemente les basta cualquier cosas que puedan cargar o tragar en el mismo lugar donde la encontraron ( vegetales rancios, carnes podridas o panes verdes). El mayor espectáculo es cuando las tiendas del grupo INTUR dejan su basura en el parque central y ambos grupos de miserables se dedican a esculcar en ella, puede que se den disputas que terminen en muertos a cuchillazos o detenidos por la policía.

Una gran parte de las calles del centro tienen ese olor reconocible a vómito, orines y excremento; hay putas en todos los caminos y borrachos que dejan caer su baba sobre la acera. Los militares caminan entre este mar de condenados; pero la seguridad es sólo aparente, en cualquier momento usted puede ser asaltado, secuestrado, quebrarse las piernas en un desagüe al que le han robado la tapa, irse en agujero mientras llueve en el mercado y ser arrastrado a una fosa séptica o, en el mejor de los casos, ser asesinado por los once lempiras (0.50$) que cuesta un taxi colectivo.

La ciudad está rodeada por grandes cinturones de miseria que representan las tres cuartas partes de la población. En esas colonias pasa de todo y sólo el hecho de estar vivo es un milagro( otra vez esa palabra que acá no existe). La gente vive en las laderas de los abismos y en casa de construcciones que se hacen con madera y láminas.

Aunque los demás pobladores niegan constantemente estas situaciones y tratan de "vivir su vida", a veces es inevitable que una realidad invada a la otra: si usted va en carro o taxi tiene que cerrar siempre las ventanas, pues manos indiscretas pueden entrar y tomar sus cosas o lo pueden amenazar con una pistola para que las entregue; en los autobuses urbanos, hay grupos de asaltantes, muchachos de entre 10 y 20 años en la mayoría de los casos.

Encima de todo esto, hay anuncios que llaman una vez más a confiar en la democracia y en donde jóvenes de clase media (el 20% de la población) salen pidiendo a los políticos que "No los decepcionen de nuevo", lo irónico es que son los mismos políticos los que pagan esos comerciales, y en los periódicos se coloca publicidad en donde se dice que la elección es lo importante, que la democracia es como elegir entre diferentes platos de comida o entre qué equipo de fútbol se preferirá. Cualquier medio que se oponga a esta democracia y paz es cerrado, toda persona que se niegue a ella es encerrada o tildada de comunista y todo extranjero que critique publicamente la situación es declarado como non grato y mal visto, aunque sea de manera verbal por cualquier ciudadano de a pie. Esa democracia, donde la participación es definida como el simple hecho de votar, tiene 26 años de existir y es comandada por las mismas personas que la fundaron o sus descendientes.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Legend of Zelda: Majora's Mask



Para bajar un poco las tenciones y después de malos pronósticos haré una revisión de una entrega de “La leyenda de Zelda” o simplemente “Zelda” (cómo así le decimos). Es un juego que de verdad me marcó en la adolescencia, pero nada más allá y de seguro se preguntarán el porqué; pues la razón es que su historia rara vez dista ser el simple “caballero rescata a joven princesa de las manos de malo maloso”; es decir hay un joven muchacho (a veces un niño) llamado Link o la reencarnación de este que debe rescatar a la princesa Zelda o su reencarnación de un mago-guerrero-tirano y con ínfulas de conquistador llamado Ganondorf o Ganon. Sí, ya sé que escucha repetitivo; pero así es y, cómo ven, esta historia no resulta nada original.

Las verdaderas innovaciones de Zelda están en su jugabilidad, dificultad, sonido y gráficas; nada más. El jugador debe descifrar una serie de laberintos, castillos y acertijos, obtener armamentos e interactuar con los pobladores y razas, superar diversas pruebas de habilidad y suerte hasta que todo eso lo lleve a la princesa o mejore sus capacidades. Raras veces sucede que esto opaque una historia tan ñoña como la antes mencionada. Si lo miramos a profundidad, cada secuela es un refrito de las de las consolas anteriores, así en Ocarina of time vemos cosas que quizás encontramos en A link to the past y así sucesivamente, hasta que cada una se va convirtiendo en un compendio de sus anteriores entregas con unos cuantos cambios en la trama.

Quizás con los párrafos anteriores me grajee muchas críticas, pero aun así para mí un juego es un balance perfecto entre sus diversos elementos y hay que reconocer que sólo una entrega de La leyenda de Zelda tiene estas características y es la que viene a reinventar en todo sentido esta franquicia: La leyenda de Zelda: Máscara de Majora. 



Este juego salió en el año 2000 (año del fin del mundo para muchos errados de ese entonces) y al principio se le conoció con el nombre de “Legend of Zelda: Gaiden” lo cual me parece muy justo; porque un Gaiden, en Japón, es una historia alterna a la principal. En Máscara de Majora no aparece la Princesa Zelda como personaje central (ni que fuera necesaria, la verdad, Link podría aparecer rescatando a Xina o a Shira y en nada cambiaría el juego) y se centra en las aventuras de Link después de derrotar a Gandondorf en su quicagesamilesmillonesicentésima reencarnación ( Les prometo a los amantes de Ocarina of time dejar mi sarcasmo un poquito).

Da la desgracia que en la consola de Nintendo 64 este título sólo se podía jugar si se tenía un Expansion pack, aditamento que servía para mejorar las capacidades del 64. Ya que a los 16 me era imposible comprarlo, tuvieron que pasar algunos años hasta que llegaron los emuladores de consolas para que pudiera jugarlo.

La historia, como ya dije, cambia totalmente: Utilizamos a Link, quien cabalgaba por el bosque cuando un Skullkid enmascarado (especie de duende y niño perdido) lo ataca, y, mientras está inconsciente, le coloca una máscara y le roba su ocarina. Lo que Link no sabe es que esa máscara tiene cualidades mágicas (maléficas, ya que no sabe quitársela) que hacen que su portador se convierta en el ser que ella representa.



Después de salir del lugar donde el Skullkid lo ha dejado, Link llega a un pueblo llamado Clocktown donde está por celebrarse el carnaval anual en honor al tiempo y un vendedor de máscaras le revela su situación; además del hecho de que el Skullkid le ha robado una máscara antiquísima de enormes poderes que incluso destruyó a sus creadores “La máscara de Majora”. Ambos hacen un trato: él enseñará a Link cómo quitarse el maleficio si logra detener al Skullkid y devolverle la máscara robada.

Después de unas cuantas aventuras iniciales descubrimos que la luna caerá sobre nosotros dentro de tres días y el responsable de todo ello es, claro está, Skullkid, quien de controlador pasa a ser controlado por la máscara de Majora. Después de una chusca batalla, obtenemos como aliada a una hada arrepentida de ayudar a Skullkid, recuperamos nuestra ocarina y gracias a la princesa Zelda (no se preocupen, es la única vez que aparece) nos damos cuenta que podemos viajar en el tiempo. Evidentemente, después de volver al primer día, el vendedor de máscaras devuelve a Link a la normalidad enseñándole una vieja tonada. Es aquí donde comienza lo interesante, deberemos liberar a los cuatro dioses de los puntos cardinales en menos de tres días (la verdad es que es más la tragedia que le ponen, porque uno puede regresar en el tiempo cuantas veces quiera) quienes para variar son los únicos que pueden detener a Skullkid y que se encuentran en sus templos.





En cuanto a jugabilidad, este título se enfoca mucho menos que los otros en los acertijos y más en la habilidad para pasar fases, pruebas y resolver misterios; los castillos, monstruos y laberintos son realmente inmensos; aunque sean sólo cuatro, son un trabajo realmente titánico y superarlos lleva más de cuatro horas cada uno si es que tienes experiencia.


Pero lo más interesante es que además de los ya comunes armamentos y pociones podrás buscar las 34 máscaras mágicas del juego que te revelarán historias alternas y otras que te ayudarán en tu camino a despertar a los cuatro dioses. El juego tiene un marcador de tiempo “virtual” y en él tienes tres días para completar tus tareas, aunque con el uso de la ocarina puedes regresar siempre al primer día. También hay ayudas que debes elegir prestar o no a los habitantes de Clocktown y en los cuáles el concepto del uso del tiempo es muy importante, pues habrán personas o cosas que sólo podrás obtener a ciertas horas; hay unos que incluso te llevarán los tres días completos en un entramado complejo de relaciones y misterios que deberás ir descifrando.


Las gráficas y el sonido siguen siendo casi las mismas que las de Ocarina of time, entrega anterior de la Leyenda de Zelda para nintendo 64, sin embargo con unas texturas muy mejoradas y escenarios más nítidos, así como más elaborados; por ejemplo se lleva mis aplausos la escena de “el jardín en la luna” por sus colores y claro simbolismo. La música no creo que supere a Ocarina of time (ya ven que no soy tan malo :P) pero tampoco puedo decir que es detestable. Todo esto hace de La máscara de Majora un título interesante y distinto, de probar sin siquiera dudarlo si tienes un emulador de nintendo 64 o eres de los suertudos que consiguieron un expansión pack.Finalmente hay cosas que no dejan de desconcertar como ese bailecito de Link que pueden ver...


Recientemente sacaron un nuevo episodio de esta saga y debo aclarar que no he probado Legend of zelda: Twiglihght princess, pero espero que se salga de la línea que su creador Shigeru Miyamoto había mantenido. Mientras tanto, los dejo con la publicidad de Máscara de Majora, que me parece fotocopia de la película Armagedón:

martes, 3 de noviembre de 2009

Salo o las 120 jornadas de Sodoma (1975)


Pier Paolo Pasoli es uno de creadores más controversiales de la historia: Poeta, teórico de arte, homosexual, director de cine y comunista; no es extraño entonces que él realizara la adaptación de esta obra del Marqués de Sade. De Pasolini puedo decir que cada película suya que he mirado no ha dejado de asombrarme, de moverme al menos una fibra, su teoría del cine poesía es llevada a la perfección en la mayoría de sus películas y sus adaptaciones de obras literarias son de lo mejor.

En "Saló o las 120 jornadas de Sodoma" la historia de Sade es ambientada en el siglo XX, en la República de Saló que creo el dictador Musollini y que se convirtió en el último bastión del fascismo italiano y la ocupación alemana de Italia, ante el inminente avance de las tropas aliadas. Los trágicos hechos de esa época es algo de lo que Pasolini podía hablar con certeza, puesto que a él le toco vivir precisamente en esa zona de conflicto y ver las atrocidades que cometieron los nazis y fascistas.

En el argumento, cuatro personajes, sólo nombrados como el Presidente, el Duque, el Obispo y el Magistrado acuerdan contraer matrimonio con las hijas de cada uno en un ritual de tintes paganos, ayudados por varios, capturan a los más bellos y bellas adolecentes de la región y los llevan a su mansión, donde realizarán una orgía sangrienta. Es así que esta película se transforma en una gran alegoría de la ocupación Alemana; pero limitarla a eso sería quitarle mucho. La trama se encuentra dividida en segmentos acordes a algunos círculos del infierno de Dante y de manera muy personal creo que reflejan actitudes que toman las personas durante estos conflictos, ya sea como los que ejercen o los que reciben lo allí descrito: Anteinfierno, en referencia a los indecisos; círculo de las manías, en referencia a las perversiones; círculo de la mierda, en referencia a los aduladores y el círculo de la sangre , en referencia a los violentos. Esta obra tiene también breves intervalos en dónde los Fascistas discuten en sus habitaciones sobre la ideas de Nietzsche y el banquete de Platón, pasajes que de una u otra forma están ligados con la razón de sus actos. Hay que agregar también que el mismo Pasolini decía que esta película no se limitaba a los sucedido en los años de la guerra con el pueblo italiano y también podía ser aplicado a la modernidad, un ejemplo de ello sería el círculo de la mierda que sería una acusación a los alimentos chatarra que él llamaba "Basura inútil" o que los personajes del Presidente, Duque, Obispo y Magistrado representan a las superestructuras de la sociedad (Iglesia, cortes, gobernadores y monarcas o burgueses) que apoyan el terror que se impone y lo cual no deja de ser distinto en la historia de muchos países.

Fuera del apartado cinematográfico, éste filme tuvo muchos problemas legales y de distribución debido a que la mayoría de los actores son menores de edad sometidos a diversos tratos crueles y degradantes a lo largo de toda la trama, es por ello que fue prohibida en muchos países y en América es tan difícil de conseguir. Así que si algunas vez tienen la oportunidad de verla, pues sientánse dichosos, están entre los pocos privilegiados en muchos lugares del mundo; aunque siendo sincero, en cierta ocasión la pasaron muy de madrugada en el canal RETRO durante un siclo de cine-literatura. No deben creer por eso que lo que mueva esta película sea el morbo, en realidad es uno de esos filmes difíciles de ver por sus escenas chocantes para la época ¿provocador? claro y logra su objetivo.

Bien, quise hacer este post en parte porque hace unos días alguien de la resistencia dijo "Van 120 jornadas" y se me vino a la mente este filme. Hago la aclaración que el trailer es hecho por un fan y no el original, que no me queda claro si alguna vez existió alguno, pues Pasolini murió antes del estreno de este filme.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Un anuncio de Manuel

Pienso cambiarle el nombre a este blog, sólo llevará algunos minutos y no creo que sea del todo malo. El estilo seguirá siendo el mismo, pero desde ya, como pequeña antesala verán que cambié el nombre de mi perfil y pronto haré lo msimo con la foto. Aprovecho para anunciarlo, porque eso llevaría consigo el cambio de dirección que aportunamente estaré anunciando en los blogs de mis afiliados. Dentro de pocos días podré revisar de nuevo esta página en la casa y ya no tendré que escribir tan apurado en una hora libre durante el trabajo. Espero que nos sigamos leyendo los unos a los otros en esta blogosfera hondureña.

Sin más, muchos saludos para todos.